Siempre que me toca hablar o en este caso escribir sobre películas que ya tienen décadas, que son “viejitas” de allá por inicio del siglo XX, me gusta hacer la aclaración que un buen punto para poder consumir el producto es ubicarse en esa época, en ese momento; así las historias, lo que vamos a ver y escuchar en alguna película cobra un realce y se convierte en una experiencia maravillosa, yo sé lo que les digo. Y por mencionar algún ejemplo, basta con mirar bajo esta óptica o recomendación el “Viaje a la Luna” (1902) de Georges Melie, “El muchacho” (1921) de Charles Chaplin, “Nosferatu” (1922) de F.W. Murnau o la “Criatura de la Laguna Negra” (1954) de Jack Arnold, si la vemos con ojos del siglo XXI tendremos algo irrelevante, a lo mejor aburrido, algo que ya hemos visto o sin mucho sentido; pero si nos ubicamos, si nos transportamos a esa época, si nos vemos en una sala de cine a inicio o mediados del siglo XX viendo estas películas, seguro, fijo, será algo increíble!! Y dentro

A esta reseña no hay que darle mucha vuelta, Videodrome es considerada como una obra de culto, producto de la mente de David Cronenberg unos de los grandes nombres del cine   obsesionado con el terror corporal. Advierto desde ya que es una movie que hay que verla si en algún caso no lo han hecho aún. Es de reconocer que el director canadiense, ha desarrollado una extensa carrera dentro del género, hay algunos títulos, un tanto digeribles y otros por el contrario, incompresibles; pero hay que reconocer que dentro de ese catálogo hay muchas, como es el caso de Videodrome, donde vemos un balance entre la historia bizarra pero sólida, lo grotesco, lo extraño, el suspenso, la intriga, el erotismo, el dominio, control,   entre muchos otros elementos. En “videodrome” se acuñó uno de los términos que a lo largo de la carrera vino a definir el género, “La nueva carne” esa extraña mezcla entre lo orgánico, lo humano, con alguna especie de tecnología, industrias, máquinas, parafilias o cienci

Desde que recuerdo nombrar   Alien "El octavo Pasajero" que pasó por el cine a finales de los 70's, fue parte de mi lista de cintas que la   única forma era esperar hasta que la transmitieran en "Súper Cine 6" Canal nacional a las   9:00 pm. Y soy honesto, primero vi la secuela “Aliens” de James Cameron" un 25 de Diciembre con mi tía, nada más los dos (una lindura de Mujer) nos fuimos al cine Terraza al que le llamo: 'el Vietnam" de los cines, ya que la función de 25 de Diciembre y 1 de enero, se convertían en un campo de guerra: una enorme cola amontonados en la sala de espera, muchos tomando licor por resaca, gritándole al encargado cuándo abriría la puerta y claro ya dentro llovían los silbadores, los cohetes y hasta volcancitos enfrente de la pantalla, incluso ya comenzada la película. Así comenzó mi interés por la franquicia de el alienígena, que a través de cuerpo humano se procrea. En esta ocasión después de debutar varias secuelas por

Para mí fue la primera película que vi de Geoffrey Rush, y desde entonces quedé alucinado por su actuación, de cierta manera digamos que me marcó para seguir la pista de su trabajo, desde el gran Capitán Barbosa, en los Piratas del Caribe, o como Nigel en Buscando a Nemo, o el increíble papel de Philip, el amante del teatro en la espléndida Shakespeare Enamorado. Allá por 1996, este actor australiano interpretó a un pianista prodigio llevado a la locura a raíz de diferentes factores, dicho papel le significó el reconocimiento de la academia a la mejor actuación de ese año. Shine es una película que nos lleva desde la infancia, juventud y edad adulta de David Helfgott (Geoffrey Rush), un pianista australiano nacido en una familia, digamos que, en condiciones de pobreza, quien con mucho esfuerzo y dedicación logra ser reconocido en su país como un talento; sin embargo, tras de ese reconocimiento podemos notar una   historia de presión, dominio y el querer demostrar en especial a su p

Aunque adoro el cine comercial, media vez sea bien hecho, tengo que reconocer que siempre ha sido mi común a pesar que ahora me he inclinado mucho más por el cine independiente o experimental.  Cuando de pequeño veía que anunciaban en los canales nacionales el comercial de los premios "Oscars" me emocionaba mucho, y aunque no era un niño prodigio enfocado en el gusto por cine, sí era muy apasionado y siempre por herencia de mi Abuela que me inculcó para comenzar memorizando todo los nombres de los actores y actrices de las películas preferidas que para ella era el cine clásico.   Pero simplemente en todo el espectacular transcurso de el show, lo hacía esperando y dejando pasar  todos los momentos aburridos a mi gusto, por el momento que siempre y hasta  ahora me eriza, el momento del listado y ganador y las mejores a mejor efectos especiales, a mejor maquillaje, mejor sonido y mejor animación o corto de animación. En 2019 la ganadora de mejor corto de animación fue 'Hair

Allá por inicios del siglo XXI, recuerdo todas las expresiones de la gente que estaba en la sala de cine cuando terminó esta película, algunos gritaban que era una m%$3da aburrida y otros indignados porque la famosa bruja de Blair nunca aparecía, a lo mejor pensando que iba a salir volando algún espectrillo en una escoba matando a medio mundo con los poderes de su varita o algo al respecto. No, eso no pasó en el “Proyecto de la Bruja de Blair”, ya que esta película se fue por un lado a lo mejor no muy explotado o en todo caso comprendido para quien llega a ver una película de “terror”… el miedo, natural e instintivo es muy diferente y hasta cotidiano, el terror que nos hace buscar sobrevivir, correr, esquivar algo que pueda hacernos daño. Y es que este miedo lo podemos experimentar en la oscuridad, cuando escuchamos un ruido que no le encontramos la explicación, el miedo de correr entre sombras sin un rumbo aparente, sin saber por qué exactamente lo estamos haciendo, ese miedo ha

De Stuart Gordon, hay que reconocerle que sus películas tienen eso genial de lograr una combinación extraña de géneros en sus historias, tal cual lo mencioné en una anterior reseña sobre el “Re-Animator” y es que por lo general estas historias se van por una o dos líneas (o es terror, o es humor negro, o es seria, o es gore) y cuando se arriesgan a hacer esas mezclas los resultados no son como los esperamos. Este no es el caso, con “From Beyond”, Gordon y su equipo, logró realizar lo que a mi gusto considero una joya dentro del género. Luego del “Re-Animator”, exactamente un año después, este director llevó otra historia de Lovecraft a la pantalla con un esquema y fórmula muy similar, equipo de producción, actores, guionistas y vaya qué resultado, si bien es cierto no fue tan conocida posteriormente como la historia del famoso suero reanimador, es una de las escogidas dentro de esa gloriosa década de los ochentas, donde el humor, la comedia, el terror, el gore y lo erótico se mezcl

De Alejandro Amenábar, hay que mencionar que tiene dentro de sus trabajos, varias películas interesantes y que lograron buenas críticas y éxito en las salas de cine, así tenemos la clásica “Abre los ojos”, “Los otros”, “Ágora” y la ganadora del premio Oscar “Mar Adentro”, una carrera muy notable, sin dudas; sin embargo es bueno recordar en gran inicio que tuvo con su primer largometraje, cuando en 1995 dirigió “Tesis” una producción española muy particular y bien lograda dentro del thriller psicológico y el suspenso. Una historia directa, que de tanto serlo, puede caer en lo previsible; sin embargo con un buen trabajo de guión y desarrollo de la historia, nos logra meter en un ritmo donde, siempre me gusta mencionarlo, nos hace dudar de casi todos los personajes, logrando que estemos pendientes del desenlace y ver si nuestras apuestas fueron las acertadas o caímos en el juego de la dirección. Hay que reconocer lo interesante en cuanto al enfoque de las temáticas del cine gore extre

En las historias de guerra, muchas veces podemos pensar que hay un bando bueno y otro malo, dependerá en gran parte por la ideología, las experiencias vividas entre otros factores; sin embargo lo que es un hecho es que alrededor de ella hay historias duras, atroces y abusos en ambas partes, así es y así será; los héroes para unos son los bufones para otros, en la guerra nadie puede decir que ha sido un santo. Sin embargo, dentro de la guerra hay historias, pequeñas experiencias que cambian vidas, aflora el negativismo en muchos casos o en el caso contrario hace en el ser humano aflorar lo positivo y buscar la manera de sobrellevar tan traumática experiencia.   La sensación que me da Jojo Rabbit, fuera del tema ideológico, es la frescura de una historia que ha sido moldeada y tocada por varios géneros (Comedia, acción, drama, humor negro) haciendo que la película sea una opción particular para ver lo cruel, lo fuerte, lo agobiante de la guerra desde una ojos de unos dulces pero atribu

Un hombre, aparentemente de la clase trabajadora, con muy extrañas prácticas que en gran parte tienen que ver con el uso de metal, máquinas, desechos y buscar la manera de integrarlas o fusionarlas a su cuerpo, en un episodio mientras se inserta una barra de metal en su pierna, queda impactado y sale corriendo por las calles en su desesperación ante lo que acaba de observar. En su euforia y descoordinación, es atropellado por una pareja quien al ver el cuerpo deciden ocultarlo y dejarlo en el abandono. Poco tiempo después, la pareja, en especial el hombre, comienza a sufrir una serie de alteraciones grotescas que poco a poco lo van transformando en una especie de humano fusionado con restos de basura industrial y maquinaria e irá entendiendo que esta es la venganza o el castigo que deberá de sufrir por haber atropellado a aquella persona. Es una historia bastante sencilla y al grano, no hay dónde perderse, pero lo interesante de Tetsuo (1989) del director experimental Shinya Tsukamot