Maniac (1980) por TOOLTOBAR
En el cine de terror, específicamente dentro
del slasher, gore u otros subgéneros, siempre noto e identifico dos corrientes,
una que trabaja bastante la historia de los personajes, de los asesinos o
psicópatas que son los protagonistas de la historia, y otras que ni por cerca
se preocupan por esos elementos, tomando en cuenta nada más el baño de sangre o
la explosión de vísceras por doquier como gancho para llamar la atención; sin
embargo debo reconocer que en ambas líneas hay títulos sobresalientes y que son
dignos de observar y tenerlos dentro de las listas.
Para esta reseña, por inicio del 80, surgió un
título que podría considerarlo como un eslabón que vaga entre una historia con un
enorme potencial, entre lo real y fantasioso, a lo mejor con algunos problemas
en su historia y producción, pero que fue un esfuerzo que en su momento, y me
atrevería a decir que aún en estos días, trata sobre asuntos que de cierta
manera perturban o inquietan por su crudeza.
Y es que sólo basta con mencionar que el
protagonista de la historia es un tipo común y corriente, nada de fuerzas
sobrehumanas o con poderes sobrenaturales, un asesino sigiloso que se mueve en
la urbe de New York acechando mujeres en u irritante enfoque misógino, un tipo
tan brutal, demente y que irónicamente se puede llegar a considerar como un
producto de las experiencias traumáticas vividas y el mundo vicioso en el cual
se mueve el cual lo corrompe y deshumaniza, mucho más real si lo queremos ver
de esa manera.
Dirigida por William Lustig, la historia fue escrita por Joe Spinell, quien
lo podemos relaciones más que todo en varios papeles secundarios de películas
que son consideradas como clásicos y de culto, así lo vemos en “The Godfather”,
“Taxi Driver”, “Rocky” por mencionar algunas pero en esta ocasión, Spinell
escribe la historia y además se encarga de encarnar al desquiciado asesino.
La historia es directa, tenemos a Frank (Joe Spinell)
un hombre que desde la primera escena notamos que no está en sus cabales, a
primera vista lo podemos ver como alguien tranquilo, ya mayor de edad, un tanto
lento y parsimonioso que deambula entre las calles de Nueva York y su
desordenado apartamento lleno de maniquíes.
Dentro de esta pasiva pero a la vez inquietante
apariencia, se esconde un asesino de mujeres, con la obsesión de arrancar las
cabelleras o poderlas utilizar para decorar sus maniquíes en un extraña fijación
ocasionada por las traumáticas experiencias vividas a lado de su difunta madre.
Su único objetivo y sentido es realizar estos
crímenes, con una frialdad pasmosa acompañada de momentos de culpa y euforia,
en una interminable ola de acechos y asesinatos, una y otra vez en de una
manera que parece no tener fin, es un insaciable asesino. Irónicamente Frank
logra entablar una extraña relación con Anna (Caroline Munro) una fotógrafa que
desconoce las oscuras historias del Frank y el inminente peligro que corre a la
par de este maniático.
Dentro de los grandes clásicos del género, no hay
que dejar de lado a esta joyita enterrada enfermiza y brutal del género, la veo
y a pesar que lleva 40 años de haber sido filmada, tiene ese toque retorcido y
real que aun viéndola en estos días, es muy vigente; la película a lo mejor en
su producción no es un monumento pero llega a entregar momentos sofocantes y
frustrantes, al ver el rostro, la tranquilidad y la frialdad del asesino,
Spinell, su mirada, sus posturas y su actuación no dejan de incomodarte y
cumplir con el objetivo de la película.
A estos elementos, sólo les dejo un detalle que
es garantía, ya que el encargado de los efectos especiales no es ni más ni
menos que el gran Tom Savini y con esto nos aseguramos escenas de
estrangulamientos, mutilaciones, desmembramientos, degollamientos, puñaladas o
como olvidar la impactante e insuperable escena del escopetazo!!! Gore!!!
En el año 2012, se realizó un remake el cual no
está demás ver ya que acá se desarrollan elementos dentro de la cinematografía
que no vimos en la versión original (debido a problemas de guión, recursos para
la fotografía, sonido y otros); además, la historia fue reescrita por el
francés Alexandre Aja quien ha estado como director de ya clásicos como “Haute
Tension”, el remake de “The Hill Have Eyes” y el papel de Frank es interpretado
por Elijah Wood, una propuesta que hay que valorar, incluso me atrevo a decir
que hay que ver las dos.
Con “Maniac” repárese para un inquietante
festival de asesinatos, traumas psicólogicos, encuadres sofocantes,
alucinaciones y polémica; sin dudas es una de las imperdibles para los fanáticos
del cine de terror, amantes del gore y slasher, directa, cruda, descarada e
irreverente, sin dar muchas vueltas… conozcamos la historia de Frank Zitto.
Película de culto de Spinell, pero del más
enterrado!
TOOLTOBAR
TRAILER "MANIAC"
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